La estimulación sexual masculina es un proceso complejo: interviene el cerebro, las hormonas, las emociones, los nervios, los músculos y los vasos sanguíneos. Así, la disfunción eréctil (DE) puede ser provocada por un problema que involucre a cualquiera de estos factores. No hay que olvidar el estrés o los trastornos de la salud mental, como la depresión, que también pueden causar o agravar la DE. En ocasiones, una combinación de problemas físicos y psicológicos pueden ser los causantes de la DE. Por ejemplo, una afección física menor que detenga su respuesta sexual podría generar ansiedad sobre el mantenimiento de una erección. La ansiedad resultante puede llevar a que se agrave esta afección.
La experiencia ha demostrado que existen muchas causas posibles para la DE y que pueden incluir, tanto desórdenes emocionales, como físicos, dado que el cerebro cumple un papel fundamental a la hora de desencadenar la cadena de acontecimientos físicos que provocan una erección, comenzando con las sensaciones de excitación sexual.
¹ Dr. Fernando Guzman, Médico
Gerente de Productos Farmacéuticos en Denk Pharma
Según cuál sea su causa, existen diferentes opciones de tratamiento para superarla.
Los pacientes pueden decidir junto con un proveedor de servicios médicos qué tratamiento y qué medicamento serán más efectivos para su caso puntual.